.:: Historia de Puno

ETNIAS EN PUNO

Apreciemos tomas de Capachica, tierra del gobernante puquina Choquechuman

CHOQUECHUMAN
Iniciamos la secuencia de semblanzas con Choquechuman, un personaje de estirpe puquina y la personalidad de mayor data que conocemos de la actual provincia de Puno.
LAS ETNIAS PUNEÑAS
En la hoy provincia de Puno, la primera etnia fue la de los cazadores, no se conoce la lengua de esta etnia, solo algunas palabras; después se contó con la presencia de otras etnias, las mismas vertebraron sus lenguas, los agricultores la lengua puquina y los pescadores la lengua uruquilla. Hacia 1100 incursionaron tierra puneña pobladores de habla aymara y hacia 1450 pobladores de habla quechua; de manera que antes de la invasión hispana los puneños se comunicaban a través de las lenguas puquina, uruquilla, aymara y quechua.
LA PREPONDERANCIA PUQUINA
En la actual provincia de Puno los puquinas lograron una primacía de tres milenios, puesto que esta provincia se hallaba en la jurisdicción de las culturas Qaluyo, Pukara y Tiwanaku, culturas que florecieron por obra de los pobladores de habla puquina, en tierra puneña del año 1400 a. C. hasta el año 1100; es más cuando lograron hegemonía los reinos aymaras, los pobladores del reino Qolla (1100-1450) continuaban comunicándose por medio de la lengua puquina.
CAPACHICA Y COATA
En la primera centuria de la colonia los pobladores de los repartimientos de Capachica y Coata seguían hablando el puquina. Por la Copia de curatos se conoce que hacia 1600 en los repartimientos de Capachica y Coata se comunicaban por el puquina; en Tiquillaca por el aymara y puquina; en Paucarcolla por el aymara, puquina y quechua; en Ichu y Puno, Chucuito y Ácora por el aymara. En el Archivo Regional de Puno se hallaron dos documentos, por el documento del 21 de junio de 1654 se conoce que la mayoría de los pobladores de Paucarcolla seguían haciendo uso de la lengua puquina; por un documento de 1718 se sabe que en Coata persistía plenamente la lengua puquina. De manera que en el primer tramo colonial la lengua puquina se mantenía con vigor, sobre todo en el área qolla, los capachiqueños y coateños se distinguían por ser puquinahablantes.
EL EMPODERAMIENTO DE CAPACHICA
Antes de la presencia aymara y quechua en la cuenca norte del Titicaca los puquinas capachiqueños lograron un empoderamiento por ser un pueblo agrícola, textil y ritual, a decir de Térèse Bouysse-Casagne: “los puquina de Capachica constituyeron poblaciones de un alto nivel económico, con diversas especializaciones y que estuvieron también en condiciones de crear centros de culto importantes. Estas comunidades, que vivían «entreveradas con los uru», tuvieron a su disposición la mano de obra de este grupo y compartieron cultos comunes en el lago”.
EL GOBERNANTE CHOQUECHUMAN
En el tiempo del influjo de la cultura Tiwanaku, cuando la lengua puquina se encontraba empoderada y antes de la presencia aymara, logró notoriedad una personalidad identificada por el cronista Martín de Murúa como CHOQUECHUMAN, él se distinguía por ser un gobernante puquina de gran prestigio regional, natural de Capachica, su notoriedad y prestancia se debe a que representó a un pueblo de gran desarrollo agrícola y ganadero, de extraordinario arte textil y de reconocido prestigio ritual. Por entonces, Capachica se encontraba en el área nuclear de los campos elevados y de los andenes; los capachiqueños se distinguían como artesanos textiles, elaboraban una tela fina, llamada cumbi; es más desde Capachica se controlaban las islas del Sol y de la Luna; de manera que Capachica era un indiscutible centro de poder.
EL CRONISTA MARTÍN DE MURÚA
En la segunda mitad del siglo XVI el cronista Martín de Murúa vivió en Capachica, como cura doctrinero de ese repartimiento, él en 1609 escribió: Los de Capachica “fueron reyes y reinaron antes de los Ingas y tuvieron por Capitán a un llamado Choquechuman los cuales fueron los primeros que se vistieron de llancapata hecha de cumbi, labrado con algunas diferencias y collcapata que es ajedrezada, las cuales mandaban hazer en Capachica por ser indios muy diestros en este menester”.